Despojaos de todo
Reflexión bíblica de fray José Fernández Moratiel, fundador de la Escuela del Silencio
Bendito sea el lecho que en la noche nos recibe y nos propicia el descanso.
Bendito sea el silencio que nos acoge y recibe y nos da un cierto descanso, nos da un cierto sosiego al desnudarnos.
Si uno se acuesta vestido no descansa bien.
Es bueno en este lecho del silencio desvestirse, despojarse de todo lo que la vida nos oculta. Desprenderse de tantos papeles que uno hace, disfraces que ocultan nuestro semblante íntimo, aquello a lo que estamos llamados a ser.
Descansará mejor en la medida que en el silencio te desvistas, te desprendas.
Bendita sea la hora de la noche que nos acoge y propicia un oportuno descanso.
Que en esta hora te puedas desprender de todo.
No descansarán en el silencio si no te desvistes. Si no te permites quedar en una pura desnudez.
Quizá uno no se desviste tanto para reconocer su propia verdad. En el desprendimiento del silencio aparece toda la verdad.
Bendita la noche. Bendito el lecho. Bendito el silencio.
Fray José Fernández Moratiel