Los últimos Pontífices han dedicado documentos doctrinales acerca del culto a María y de manera más concreta acerca de la oración del Rosario. Un texto fundamental, que ofrecemos a continuación, es la Exhortación Apostólica Marialis Cultus de Su Santidad Pablo VI, sobre el culto a la Virgen María, que dedica uno de sus capítulos a la oración del Santo Rosario. En los últimos años también ha sido fundamental la Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae
del Sumo Pontífice Juan Pablo II, que escribió con motivo del Año del Rosario en 2003, donde incorporó los misterios Luminosos que completan los principales msiterios de la vida de Jesús.