dominicosPadre Cueto y Madre Pilar
Biografía y oración al Padre Cueto y Madre Pilar
¿Quiénes son?
Congregación fundada el 12 de junio de 1895 en las Islas Canarias, por el P. José Cueto OP y la M. Pilar Prieto. Nacidas para responder a la educación humana y cristiana de la mujer en un momento histórico en que sus posibilidades de formación eran bien escasas. La “Educación cristiana, preferentemente de la juventud”, ha sido la forma específica predicar a nuestro mundo.
La vida del Padre Cueto, dominico, (Santander 1839 – Las Palmas G.C. 1908) transcurre entre Ocaña, Filipinas, Ávila y durante 17 años, Obispo de Canarias. Resaltó en él la virtud de la caridad, expresada en su amor y solicitud hacia los pobres, los enfermos, los presos y necesitados de la Palabra de Dios.
Junto a Madre Pilar (Granada 1863 – La Palma 1908) funda colegios de enseñanza femenino en Las Palmas de G.C., San Cristóbal de La Laguna y Santa Cruz de La Palma, atendiendo así a las necesidades del momento. El 12 de junio de 1895 nace la Congregación de “Dominicas de la Enseñanza”, más tarde, “Dominicas Misioneras de la Sagrada Familia”, extendida por España, América (Chile, Venezuela, Colombia, Bolivia y Cuba) y en África, Camerún.
- Pilar busca nuevos caminos, con la firme convicción de la importancia del papel de la mujer en la sociedad, a la cual hay que ofertar un camino de realización personal, a través de una formación humana y cristiana a todos los niveles.
¿Qué nos dicen hoy?
“Yo estoy cada vez más convencida que la regeneración de la sociedad ha de empezar por la mujer” (Madre Pilar)
“No basta pensar que perdonamos, hay que ponerlo por obra” (Padre Cueto) “Háganse todas las cosas con belleza y dulzura” (Padre Cueto)
Para orar
“ABRE NUESTROS OJOS”
Señor, has venido a traer una buena noticia a pobres, marginados y vencidos.
Has puesto sus gritos en tu boca,
asumes sus reivindicaciones hasta sufrirlas en tu carne, y vienes a hacerlas fructificar, y llenarlas de amor,
más allá de sus utopías y de toda esperanza.
Abre nuestros ojos a quienes sufren cada día
la estafa, los golpes y las injusticias del reino del dinero y de la guerra, y de los poderes que les sirven en lugar de servir a las personas.
Empapa nuestros corazones de misericordia.
Haznos lúcidas y responsables.
Quítanos tanta prudencia y miedo, danos fuerza y osadía.
Purifica y sostén nuestros compromisos en las acciones sociales y políticas,
para que la dignidad y la fraternidad no sean palabras engañosas y vacías para pobres, marginados y vencidos.
Pon en todas nuestras opciones y luchas generosidad, amor y esperanza.
Que nuestro testimonio siga siendo buena noticia, la tuya, para quienes Tú más quieres,
tus hijos e hijas pobres, marginados y vencidos.
Oración
Dios bueno y misericordioso, que quisiste que tu Hijo naciera en humildad y pobreza: haz que, al celebrar hoy la fiesta de la Sagrada Familia, nos sintamos llamadas a ser fieles en el camino del Evangelio, alabando tu bondad y celebrando la salvación que nos regalas. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.