Celebraciones de la Virgen del Rosario en varias ciudades de España
Varias ciudades españolas celebran la festividad de la Virgen del Rosario con gran solemnidad, como patrona e intercesora.
La Coruña
Centenares de personas se congregaban en la mañana del siete de octubre ante el palacio municipal de María Pita para contemplar la alfombra floral con la que, un año más, la ciudad honró a su patrona, la Virgen del Rosario.
Por la mañana tuvo lugar la tradicional ofrenda floral. Una vez conformada la comitiva municipal, esta emprendió el breve trayecto desde María Pita hasta la iglesia de los Dominicos, que se llenó para escuchar la homilía ofrecida por el arzobispo Julián Barrio. Ante los representantes políticos, Barrio reclamó «diálogo» para mejorar la sociedad. Una sociedad en la que reclamó un mayor espacio para los mayores, «a los que tal vez no les estamos dando todos los valores de esperanza».
Por la tarde tuvo lugar la procesión que partió de la Iglesia de Santo Domingo y se encaminó a la Plaza de María Pita. La imagen de Nuestra Señora iba escoltada por policias nacionales, seguida por la comunidad de frailes dominicos y las autoridades municipales.
Más información: La Voz de Galicia
Álbum de fotos: La Opinión
Cádiz
El viernes 7 de octubre fue el día de la festividad del Rosario, patrona de la ciudad de Cadiz. Una jornada que arrancó a las 9.00 con una misa y a las 11.00 horas con una función del voto, presidida por el obispo Antonio Ceballos. Éste será su último acto oficial como prelado desde de 17 años ocupando este cargo. Siguiendo el 'leitmotiv' del 'Maginificat', Ceballos (que llevaba una casulla pintada por Carmen Marichal y una mitra de las Jornadas Mundiales de la Juventud) pidió a los gaditanos «ilusión, fervor y valentía» ante «muchos que están desilusionados». Por eso pidió a «Santa María del Rosario la fuerza del espíritu necesaria» para alentar a la ciudad ante los momentos de crisis que se viven.
Tras la misa, la alcaldesa renovó el voto de la ciudad, tal y como es tradición desde el día 8 de noviembre de 1730, cuando el Ayuntamiento gaditano hizo un voto de asistir en corporación todos los primeros domingos de octubre al Convento de Santo Domingo, en acción de gracias por la terminación de una epidemia de fiebre amarilla y después con motivo del maremoto acaecido en noviembre de 1755. En su discurso, la regidora se acordó de los más necesitados y los jóvenes especialmente castigados por la crisis. Tras la misa, a las 12.30 horas se abrieron las puertas de Santo Domingo para que los gaditanos pudieran hacer la ofrenda floral a la Virgen del Rosario. Es una tradición que se remonta a 1947, año de la Coronación Canónica, cuando los dominicos pidieron a los niños de la ciudad que regalaran una vara de nardo a la Virgen del Rosario. Así se asentó una tradición de cariño que año a año se repite «por miles». Esa es la cantidad que el prior de los dominicos, Fr. Pascual Saturio, cifraba ayer en número de nardos que recibe la Patrona de la ciudad.
Durante la jornada, la Fundación Gerón celebró una jornada de puertas abiertas con visitas guiadas al convento rehabilitado como residencia. Ya por la tarde, a las 18.30 horas dio comienzo la procesión de alabanzas por las calles de Cádiz. Ahí fue el momento, en que el cariño de los niños se puso de manifiesto en un paso cuajado de nardos.
Más información: Diario de Cádiz
Granada
El 11 de Octubre, se celebró a las 8 de la tarde la solemne función del Voto de la ciudad, realizado por el Ayuntamiento de Granada por primera vez el 11 de octubre de 1679, cuando estando la ciudad asolada por una epidemia, un resplandor en el rostro de la Reina del Rosario anunció el fin de la epidemia. Desde entonces todos los años, el Ayuntamiento consagra esta Eucaristía en memoria y acción de gracias por los beneficios que ha recibido de la Virgen del Rosario, Copatrona de la Ciudad, generaciones de granadinos.
El doce de octubre, fiesta de la hispanidad, se celebró la Eucaristía a las 12 de la mañana, presidiendo el párroco de Ntra. Sra. de las Angustias. En el trascurso de la Eucaristía se impuso la medalla a los nuevos cofrades del Rosario.
A las seis de la tarde comenzó la solemne procesión, abriendo el cortejo la banda de Cornetas y Tambores de Jesús de las Tres Caídas, seguida de hermandades de la provincia, hermandades de gloria de Granada, hermandades penitenciales de Granada, junto con las de la Parroquia de Santo Domingo, la Archicofradía del Rosario de Caravaca de la Cruz, y la Hermandad de la Patrona de Granada. El paso de la Virgen, fue portado por el Muy Antiguo y Real Cuerpo de Caballeros Horquilleros bajo la dirección de Alberto Ortega. Tras el paso se situaron la comunidad de Padres Dominicos, las comisiones militares, la Asociación de Vecinos del Realejo, el Cuerpo de Mayordomos de este año, formado por todos los que han sido mayordomos de 1961 hasta la actualidad, la representación del Excmo. Ayuntamiento y la Banda de Música de la Virgen de la Cabeza de Churriana de la Vega.
Al finalizar la procesión el Sr. Arzobispo dirigió unas palabras a cuantos abarrotaban la iglesia de Santa Cruz. Recordó cómo los dominicos han extendido el Evangelio por todo el mundo ayudados de la imagen y la devoción a María y cómo, en siglos pasados, llegaron a Oriente tras dos intentos que acabaron en naufragio: aun así, sabiendo que podían morir en el camino y que, una vez llegados, podían, como ocurrió, ser martirizados, los mejores y más preparados dominicos se embarcaban hacia lejanas tierras.
Durante los días de la festividad de Nuestra Señora del Rosario continuaron los actos conmemorativos con motivo del cincuentenario de la coronación de la Virgen del Rosario. En estos momentos sigue abierta la exposición “Nuestra Señora del Rosario. Perfume de amor”. Fray Antonio Praena, prior de la comunidad de Santa Cruz la real, en el acto de apertura de la exposición señalaba: “En ella hemos querido sintetizar no solo estos cincuenta años sino la presencia de los Dominicos en Granada que son ya más de quinientos”.
Además la Cofradía ha recibido en estos días una buena noticia: que S.M. la Reina Doña Sofía ha tenido a bien aceptar el nombramiento de Hermana Mayor Honoraria de la “Muy Antigua, Pontificia, Real e Ilustre Archicofradía de Nuestra Señora del Rosario Coronada” de Granada.
Se mantiene y se estrecha, de este modo, la secular relación de la Real Archicofradía con la Casa Real Española, habida cuenta de que fueron los Reyes Católicos quienes mandaron fundar esta Archicofradía siendo S.M. la Reina Isabel la Católica la primera hermana de la misma. De Igual modo, S.M. La Reina Isabel II fue Hermana Honoraria de esta Archicofradía, a la que honró con su visita al camarín de la Virgen y su oración ante la Imagen de la Reina del Rosario.
Salamanca
Es el tercer año que la Archicofradía del Rosario en Salamanca salió en procesión por las calles de Salamanca, cada vez con mayor número de fieles y representaciones de otras hermandades de Salamanca. Vestidos de gala, los archicofrades del Rosario estuvieron acompañados por la representación numerosa de la Medalla Milagrosa de San José, la Hermandad de Jesús Despojado, Jesús Amigo de los Niños y representación de la Estrella de Ávila. La imagen de Ntra. Sra. del Rosario salió de la iglesia de San Esteban camino de la Catedral Nueva de Salamanca. Con es ya tradicional, hizo su primera parada ante el monasterio de las Dueñas, donde la comunidad de dominicas entonó la Salve. El capataz Javier Grande dedicó una de las mejores levantadas de la tarde a las religiosas, una de las principales seguidoras de la Archicofradía. Tras su paso por la Catedral, donde se celebró una oración ante el Santísimo, salió de nuevo a la calle para volver al templo de los dominicos a última hora de la tarde.
Más información: La Gaceta de Salamanca
Madrid
Durante este mes del Rosario también se celebraron otras festividades marianas como la solemnidad de la Virgen de Atocha, Patrona de la Casa Real, en Madrid. La comunidad de dominicos predicó la novena, siguiendo las lecturas del tiempo ordinario. El primer domingo de octubre, se celebró la fiesta de Ntra. Sra. de Atocha con varias Eucaristías a lo largo del domingo y una misa solemne presidida por el prior del convento y concelebrada por el resto de la comunidad, con la presencia de los miembros de la Cofradía de la Virgen de Atocha y de otras cofradías de la ciudad, así como de representantes de la corporación municipal.
Tras la Eucaristía se inició la procesión por las calles del entorno de la Basílica. La procesión la abría la cruz de guía y tras ella la imagen de Nuestro Padre Santo Domingo, la banda de música, una representación de las diferentes cofradías de la ciudad de Madrid y la imagen de la Virgen de Atocha flanqueada por miembros de una Asociación Histórica de Madrid vestidos con trajes militares de época. Tras la imagen de la Virgen, la comunidad de frailes dominicos de Atocha y autoridades locales con el concejal de zona y otros dos concejales de la ciudad.
Un numeroso grupo de fieles siguió la procesión que finalizó en la entrada de la Basílica con una palabras de fr. Miguel Liquete en las que recordó los días vividos durante la JMJ y pidió a la Virgen por todos los jóvenes, especialmente los "atochanos" que habían participados en esos días junto al Papa. Finalizó la procesión con el canto de la Salve.
Foto: cortesía de Flashes de la Iglesia
Librea del Valle de Guerra
En muchos lugares, en recuerdo de la Batalla de Lepanto y su especial vinculación a la Virgen del Rosario, se celebran fiestas y representaciones muchas de ellas instauradas por los frailes dominicos a lo largo del tiempo. Es el caso de la llamada "Librea", un auto sacramental que se realiza en un pueblo del nordeste de la isla de Tenerife: Valle de Guerra. Es en sí mismo una secuencia de los sucesos que ocurrieron en Lepanto, el 7 de octubre de 1.571.
El traslado cívico de la Virgen del Rosario -probablemente traída por los dominicos- escoltada por su Escuadra, es una imitación de los traslados que en Cádiz se hacían de la misma Virgen desde el convento de los dominicos hasta el puerto, con cada partida y retorno de la flota de galeras y galeones que se dirigía a Las Indias, bajo cuya protección navegaban.
La Salve marinera fue el himno que los marineros cantaron a la Virgen del Rosario cuando ésta era la Patrona de la mar, a propósito de la victoria en Lepanto; y así sucedió hasta 1.901, año en el que la Virgen del Carmen le sucedió en el Patronazgo de los hombres de la mar.
La participación en La Batalla de Lepanto de un soldado español que llegara a ser ilustre -Miguel de Cevantes Saavedra- da pie a la narración de los accontecimientos en la voz de los propios autores: Felipe II, el Papa San Pío V; el Duque de Venecia Alvise Mocénigo, Juan de Austria comandante de la Liga Santa, el Sultán Otomano Selim II; Alí Bajá jefe del ejército turco, entre otros personajes que en segunda o tercera línea conformaron los acontecimientos que antecedieron la gran batalla, ya fueran las vivencias intramuros de cada corte, o la diplomacia de los gobernantes que no pudieron evitar la confrontación ni el suceso de la victoria, atribuída a la Virgen del Rosario, testigo fiel de la celebración.
Todo lo anterior conforma una celebración que con el nombre de Librea, honra a los combatientes y glorifica a la Patrona del Valle de Guerra, artífice de un tradición centenaria, Símbolo y Seña de Identidad para los moradores de este enclave isleño, desde la fundación de la ermita del Rosario el 20 de marzo de 1615 realizada por los dominicos. Fuente: Julio Rodríguez de Castro
Más información: La Librea