Congreso Internacional de Regentes de Estudios
Más de 50 frailes de todo el mundo se dieron cita en Roma, del 23 al 26 de noviembre, para participar del Congreso Internacional de Regentes de Estudios de la Orden de Predicadores.
El Congreso responde a una solicitud del Capítulo de Bogotá (2007) en el sentido de desarrollar una estrategia para la misión intelectual de la Orden, lo que implica el fortalecimiento de las instituciones académicas dominicanas y el perfeccionamiento de sus metas y programas, de manera que respondan a las genuinas necesidades, culturales y pastorales, de las diversas regiones donde la Orden está presente.
La Casa del Carmelo en Sasson (Roma) fue el escenario donde unos 48 regentes de diversas regiones y algunos invitados especiales se congregaron durante los cuatro días de encuentro.
Auxiliados por un buen número de traductores, los asistentes participaron activamente tanto de las instancias de intercambio como de los espacios de oración.
EL DÍA A DÍA
La apertura del Congreso, el lunes 23, estuvo a cargo del Maestro de la Orden, Fray Carlos Azpiroz Costa OP, quien dio la bienvenida a los Regentes, ponderando su importancia en la vida de cada provincia.
Destacó que históricamente la Orden ha sido capaz de plantearse retos y estrategias que permitieron potenciar la vida intelectual en consonancia con la misión –dígase por ejemplo, Salamanca- a la vez que animó a que de la asamblea surgiera una propuesta que sirva de base a las reflexiones del Capítulo de 2010 en Roma.
Posteriormente, Fr.. Guido Vergauwen OP, ofreció una conferencia titulada “La sociedad basada en el conocimiento y la formación dominicana”. Tras su ponencia hubo una instancia de preguntas y comentarios.
Al final de la mañana presidió la Eucaristía Mons. Jean Louis. Brugués OP, quien compartió la dimensión compasiva y ética de los estudios dominicanos.
Por la tarde, con la motivación del Socio del Maestro para la Vida Intelectual, Fray Marcio Couto, se ofreció un panorama sobre la situación de los estudios y centros por regiones, avances y retrocesos en este ámbito de la vida dominicana. Luego se constituyeron comisiones de trabajo por grupos lingüísticos.
El martes 24, P. Mark Francis csv; P. General de los Viatores, expuso sobre los desafíos del anuncio del evangelio hoy. Por la tarde, los participantes trabajaron en grupos.
El miércoles 25 se analizaron proyectos comunes por regiones y, por la tarde, se plantearon algunas orientaciones e iniciativas nuevas.
El jueves 26 los asistentes trabajaron por regiones en torno a propuestas concretas y, al finalizar la mañana, Fray Marcio concluyó el Congreso.
En la tarde hubo tiempo para la dispersión con la invitación de los frailes irlandeses a visitar las Catacumbas de San Clemente.
ESTUDIAR DOMINICANAMENTE: ¿PARA QUÉ?, ¿PARA QUIÉNES?.
La homilía de la Eucaristía del miércoles 25 estuvo a cargo del Promotor para la Formación y Vida Intelectual de Cidalc, Fray Carlos Cáceres OP.
En su meditación sostuvo que “el estudio dominicano y el sentido de la justicia están de la mano para entender, interpretar y enjuiciar las estructuras de nuestro mundo que atentan contra el sueño de Dios”.
“¿Afina el estudio dominicano nuestras fibras más profundas? ¿Nos hace ver con más compasión?” planteó Fray Carlos, para seguidamente aseverar que “nuestro estudio y la verdad que encontramos en este ejercicio de la misericordia veritatis mide, pesa, divide y entrega, al juicio del evangelio, las realidades humanas cuando son profanadas en su realidad más íntima y más sagrada”.
Destacó que “el evangelio no nos reserva sino que nos expone a perder la vida y a vivirla en honor de la verdad”. Recordó, en este sentido, que los hermanos que en la Orden “han consagrado su vida a la investigación, han sobrellevado el silencio y la incomprensión en medio de su fidelidad intelectual”. “El P. Congar, en su sufrimiento más profundo y en su fidelidad más convencida, nos llegó a confesar ‘que ha amado la Verdad, como se ama a una persona’”, evocó.
Tras confesar que en él “hay un dilema siempre presente: ¿Para qué estudiamos? Y, a su vez, ¿para quiénes lo hacemos?”, Fray Carlos aseveró que “ante la Palabra nos hacemos profetas que imaginan otra humanidad posible”.
“El estudio nos ayuda a escrutar el camino de Dios que ha de ser proclamado, invitándonos a ver visiones y a soñar realidades nuevas y posibles para nuestros pueblos”, manifestó.
FUENTE: CIDALC
Crónica elaborada en base a información proporcionada por Fray Carlos Cáceres OP, Promotor de Formación y Vida Intelectual de CIDALC.
Imágenes aportadas por Fr. Estuardo López Milián OP.