Proyectos y actividades bajo la supervisión del Maestro de la Orden, entre ellos “Domuni”

Crónica no oficial del 18 de julio del Capítulo de Vietnam

  Hoy, antes de comenzar la eucaristía se ha dicho que el Obispo de la diócesis nos pedía que rezáremos por los 15 diáconos que hoy mismo se ordenaban de presbíteros. El predicador del día ha sido el estadounidense fray Michael Bernard Sweeney. Mucha gente, dijo nuestro hermano, entiende que la Iglesia impone pesadas cargas. De ahí la necesidad de combatir este error. Pero esta no es nuestra primera obligación. Nuestra primera obligación es hablar de Jesús que alivia a los sobrecargados, a los que tienen miedo, a los perdidos. En las vísperas, tras la lectura breve, un laico dominico, Mr. Benjamin, ha hecho una breve y sencilla meditación, en la que se ha referido a la unidad de la familia dominica, en la diversidad de culturas y pueblos.

  Por lo demás, han seguido trabajando las comisiones. Cada comisión ha entregado un texto de 800 palabras, sobre el tema que está tratando, al comité encargado de redactar el prólogo de las Actas, de modo que este prólogo refleje el sentir de los capitulares.

  El coloquio de la tarde ha resultado interesante. Si ayer se habló de los conventos e instituciones bajo la dirección inmediata del Maestro, hoy se ha hablado de los proyectos y actividades encomendados a la supervisión del Maestro. Unos se están ya realizando. Otros son proyectos por realizar. Entre los realizados está Domuni, un proyecto de universidad dominicana “en línea”, y OPTIC, un espacio de diálogo sobre los desafíos éticos de las tecnologías.

3.600 estudiantes de cuarenta países

  Domuni dispensa formación en cinco lenguas para 3.600 estudiantes de cuarenta países. Las materias que imparte son filosóficas, teológicas y de ciencias sociales. Tiene convenios con algunas instituciones de Francia y Suiza, en virtud de los cuales puede dar titulaciones. Sin embargo, también tiene sus problemas, que habrá que afrontar y resolver. Esos problemas han afectado a la sección española, que impartía solamente Ciencias Religiosas y no puede ya dar títulos canónicos. Fr. Javier Carballo, en el coloquio, hizo notar el perjuicio que eso ha causado a nuestra provincia. Para los franceses ese es un asunto menor, puesto que tenían pocos alumnos en Ciencias Religiosas.

  OPTIC es una red de comunicaciones al servicio de la Orden, para reflexionar sobre los desafíos éticos de las tecnologías. Es bien sabido que hoy muchos profesionales son reemplazados por la inteligencia artificial; o que, cuestiones ligadas a los algoritmos y al transhumanismo, cuestionan la antropología cristiana.

  Se habló de dos proyectos que están en proceso. Uno de ellos busca establecer un centro especializado para promover el diálogo entre el cristianismo y las religiones asiáticas, como el budismo, hinduismo, confucionismo e Islam. La sede se encuentra en la Universidad de Santo Tomás de Manila. El segundo proyecto es de África. Se trata de establecer un instituto, que tendrá su sede en la Universidad dominicana de Nigeria, para el diálogo entre la Teología y las culturas y tradiciones religiosas africanas.

La comisión leonina y en el Instituto Histórico de la Orden

  Finalmente, fray Gilles Lucian Berceville ha presentado el trabajo que se hace en la comisión leonina y en el Instituto Histórico de la Orden. El Instituto Histórico promueve investigación y publicaciones sobre la historia de la Orden. La comisión leonina trabaja para establecer el texto de Santo Tomás según normas científicas, y para situar en perspectiva histórica y cultural su enseñanza. Se trata de proteger el texto de Santo Tomás de manipulaciones ideológicas o de interpretaciones fundamentalistas. En ella trabajan 11 miembros, 6 a tiempo completo (cuatro frailes dominicos y dos laicos), y 5 adjuntos (un fraile y cinco laicos).

  Y eso es lo que ha dado de sí el día. Es posible que mañana haya alguna noticia concreta sobre las comisiones. Pero eso ya se verá.

Fr. Martín Gelabert, O.P.