Fr. Martín Gelabert: "Cuando una Iglesia no sabe hablar en el mundo, el evangelio no es comprendido"
El dominico participa como ponente en la XVII Jornada Sant Jordi, dedicada a comprender el estilo del Papa
[Grup Sant Jordi] El papa Francisco está convencido de que "la realidad es más importante que la idea" y que hay que trabajar juntos donde sea posible, teniendo las prioridades muy claras: a favor de los migrantes, de los pobres y contra el cambio climático. Es una de las reflexiones de fondo que se han expuesto este sábado en la XVII Jornada Sant Jordi. Con el título 'Una comunidad, una persona, un camino: el papa Francisco', el acto se ha celebrado en el Hotel Alimara, en el barrio de Horta de Barcelona. Han participado más de 130 personas, 25 de ellas fuera de Cataluña, de las diócesis de Madrid, Getafe, Vitoria, San Sebastián, Bilbao, Menorca, Valencia y Castellón.
Una jornada centrada en comprender la acción y el estilo de un líder mundial al que no le falta oposición. Un líder que denuncia el clericalismo y la corrupción, con un programa de gobierno claro, anunciado ya en la elección de su nombre, inspirado en el pobre de Asís. Así lo han expuesto los dos ponentes invitados: el teólogo Martín Gelabert y la periodista argentina Elisabetta Piqué.
El teólogo y dominico mallorquín ha recogido el pensamiento de Francisco, con la necesidad de "hacer presente en la predicación la preocupación de los pobres, el compromiso con la justicia y la transformación de las estructuras eclesiales". El catedrático y decano emérito de la Facultad de Teología de Valencia ha hecho suya la alerta del Papa sobre los peligros de la autorreferencialidad y del cierre que empobrece. Y le ha contrapuesto a una Iglesia en salida, centrada en el anuncio del evangelio a todos los hombres y mujeres.
Gelabert, del orden de los predicadores, se ha detenido en la importancia del lenguaje: "Cuando una Iglesia no sabe hablar en el mundo, el evangelio no es comprensible". El teólogo ha recordado también los sínodos que ha impulsado el papa Francisco, que implican un "diálogo bidireccional de respeto y escucha mutua".
El dominico ha hablado de "signos concretos de apertura del papa", de acuerdo con el convencimiento del pontífice de que sin acción, el discurso está vacío. Entre otros, ha hablado de la acogida de las personas homosexuales, de la participación de los divorciados en los sacramentos y ha defendido "una nueva manera de tratar" el aborto, desde la pregunta de "qué hemos hecho para acompañar adecuadamente a las mujeres que viven en situaciones muy duras”.
La apuesta por la reforma de mentalidades
La segunda ponencia, a cargo de periodista Elisabetta Piqué, se ha centrado en cómo Francisco ha cambiado el estilo de ser Papa. No sólo con cambios como el vestido o el calzado, sino en la relación que establece con los demás. Francisco enseguida "se autollama obispo de Roma" y, según la periodista argentina, el cambio de estilo ha sido una "constante en su pontificado".
Piqué ha descrito un Papa con dotes de "liderazgo en momentos de mucha crisis" y una persona que "habla con mucha gente". Asimismo ha apuntado la "capacidad impresionante que tiene de comunicar" y de hacerlo en un lenguaje sencillo y llano. Aseguró que "todos lo entienden" y que "es muy consciente del poder de los medios".
Otro de los pilares de acción del Papa es la reforma de la curia, que orienta primero hacia la necesaria "reforma de la mentalidad y de los corazones". La periodista ha expuesto los cambios en varios dicasterios, y el giro que ha implicado la creación del Dicasterio al servicio de la Caridad en esta visión de una "Iglesia de los pobres y para los pobres". Ha recordado el viaje de Francisco a Lampedusa y todas las visitas que ha hecho a la cárcel.
En el retrato de la acción del pontífice ha explicado cómo está incluyendo a los laicos y las mujeres en puestos de responsabilidad del Vaticano. Ha hablado también de la reforma de las finanzas en clave de "transparencia y responsabilidad". Y ha descrito un papa por quien ya no hay temas tabúes: entre otras cuestiones, Francisco ha afrontado los abusos sexuales por parte de sacerdotes a menores.
Un papa que convoca varios sínodos para que sea “el pueblo de Dios” quien toma la palabra. Con el objetivo de acabar con el clericalismo y volver a la esencia de la misión eclesial. En este sentido, la periodista ha subrayado también el trabajo de diálogo que ha realizado también en el ámbito ecuménico con otras iglesias cristianas y de diálogo interreligioso con los musulmanes, sin olvidar el rol de tejer puentes que se espera de un papa, a favor de la paz mundial.
Menos ideología y más actitudes humanas
El acto ha contado con la participación de más de un centenar por personas, con un buen número de laicos implicados en comunidades y proyectos eclesiales, además de curas y religiosos como la dominica Lucía Caram, la teresiana Viqui Molins, el párroco de Santa Anna Peio Sánchez o Xavier Morlans, implicado también en el Hospital de Campaña, el diputado Joan Capdevila, entre otros muchos.
Decimoséptima edición con seis entidades convocantes
La Jornada Sant Jordi es un espacio de encuentro anual que promueve la reflexión sobre un estilo de Iglesia ligado al compromiso social, y arraigado en el país. El obispo de Barcelona Joan Carrera fue su impulsor. En esta decimoséptima edición son ya seis las entidades convocantes: el Grupo Sant Jordi de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, los Equipos de Pastoral de la Política y la Comunicación, la Liga Espiritual de la Virgen de Montserrat, el Consejo de Laicos de los Capuchinos de Cataluña, Justicia y Paz, y Cristianismo en el Siglo XXI.