La clave del compromiso: historia de dos encuentros
El compromiso social y político del cristiano ha sido el tema elegido este año por el Movimiento Juvenil Dominicano para su encuentro anual
El compromiso social y político del cristiano ha sido el tema elegido este año por el Movimiento Juvenil Dominicano para su encuentro anual.
Grupos de toda España se reunieron el pasado viernes 17 de febrero en Navas del Marqués para reflexionar sobre su papel en la sociedad como jóvenes católicos dominicos. El grupo de 50 jóvenes contó con la presencia de la hermana Dominica Gemma Morató, que el sábado por la mañana impartió el taller del compromiso socio-político desde la perspectiva de la Orden de Predicadores. En él, la Hermana hizo un repaso por los momentos de la vida de Santo Domingo en los que imprimió su peculiar forma de relacionarse con los más necesitados, incidiendo en la idea del diálogo y la compasión.
Por la tarde, Fermín y Ángela (Igande Berri, Pamplona) prepararon un taller en el que, por pequeños grupos, analizaron y debatieron sobre economía, ecología, inmigración o política. Ya a la noche, el Grupo Espiga (Sagunto) se encargó de la oración de las manos, que invitaba al compromiso y al valorar lo útiles que somos para un mundo cada vez más necesitado.
El encuentro concluía al día siguiente con un taller impartido por Almudena y Álvaro, en el que se adaptaba el concepto de mimo-política a la realidad actual de los grupos del MJD, y una eucaristía presidida por Fr. Ángel Luís Fariña OP, el actual asistente religioso del Movimiento.
Como ya es costumbre, el encuentro dejó más que un buen sabor de boca a todos los participantes. En palabras de Nicolás, uno de ellos: “No tengo más que palabras de agradecimiento para todos y cada uno de los que forman parte de esta gran familia, no existe mayor mensaje cristiano que el del amor y sin miedo a equivocarme no puedo sentir más que orgullo al haber contado con la gran suerte de presenciar tales muestras de humildad, cariño, alegría y sobre todo amor durante este fin de semana. ¡muchas gracias a todos!”.
Por otra parte, el grupo de Jóvenes Dominicos de Oviedo organizó una convivencia en la recién estrenada casa de Poo de Llanes. Así resume Álex (Grupo Espiga, Sagunto), uno de los monitores, la convivencia de la Comunidad de Jóvenes II: “¡Ya basta de buscar fuera!, ¡Escuchemos nuestras tripas! Afinemos nuestros instrumentos y toquemos esta hermosa partitura que es la Vida. En Poo de Llanes (Oviedo) existe una casa preciosa y verdaderamente acogedora en la que este fin de semana han sucedido cosas muy interesantes.
Saber la fórmula para cambiar el mundo te da una perspectiva de la Vida diferente y esperanzadora. No es fácil, eso ya lo sabemos, pero estamos convencidos de que es posible
La comunidad de jóvenes II de Oviedo, de viernes a domingo, ha estado de convivencia. Y Álvaro y yo, de la comunidad Espiga de Sagunto, hemos tenido el privilegio de estar llevando la dinámica. En estos breves e intensos días hemos descubierto la importancia de caminar, de cómo caminamos por la Vida. Hemos bailado, reído, llorado… Hemos aprendido a sentir a los demás, a mirar a los ojos y entender la profundidad del otro. Hemos, a fin de cuentas, descubierto la clave para hacer de este mundo un lugar mejor. Y eso es hermoso y realmente emocionante. Saber la fórmula para cambiar el mundo te da una perspectiva de la Vida diferente y esperanzadora. No es fácil, eso ya lo sabemos, pero estamos convencidos de que es posible.
Una vez más Jesús nos enseña, a través de un pequeñísimo grano de mostaza, que debemos confiar y valorar en lo pequeño, que no estamos en la Vida para ser recolectores, si no sembradores. Solo así nacen cosas grandiosas. Esta convivencia nos ha provocado, nos ha enseñado a DEJARNOS LLEVAR. Y es que algo está pasando en Oviedo para que tantos jóvenes decidan dejarse llevar y ELEGIR esta opción tan esencialmente cristiana. ¡Qué buena noticia!