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Ordenación sacerdotal en la Provincia de Bética de Fr. Gregorio Ramos Domínguez O.P.

3 de julio de 2010

El pasado día 3 de julio tuvo lugar en la parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción (sede provisional de la S.I. Catedral) en La Laguna, Tenerife, la ordenación sacerdotal del fraile dominico Gregorio Ramos Domínguez.

Ordenación sacerdotal en la Provincia de Bética de

Presidió la celebración el Obispo Diocesano Mons. Bernardo Álvarez Afonso, el cual estuvo acompañado por el Prior Provincial de la provincia de Bética, Fray Miguel de Burgos Núñez. Hubo una amplia asistencia de frailes: la comunidad del Convento de Candelaria, el Prior del Convento de Santo Tomás de Sevilla Fray Nicasio Martín Ramos; frailes de Almería, León, La Coruña y religiosas Misioneras Dominicas de la Sagrada Familia de las comunidades de Geneto (La Laguna) y Vista Bella (S/C de Tenerife). Además de Fray Gregorio, se ordenó D. Federico Armas Díaz.

En su homilía, D. Bernardo Álvarez se detuvo especialmente en la figura del Buen Pastor, tomando también como referencia la homilía del Papa en la reciente clausura del Año Sacerdotal.

El día 5, Fr. Gregorio presidió por primera vez la Eucaristía. Fue en la iglesia del monasterio de Santa Catalina de Siena de las MM. Dominicas en La Laguna (conocidas como “Las Catalinas”). Predicó el Prior del Convento de Santo Tomás de Sevilla, Fr. Nicasio Martín Ramos, que se centró y destacó la predicación profética de los dominicos, fruto del estudio y la contemplación. “Esta predicación”, expresó Fray Nicasio, “se hace realidad en Fray Gregorio”. Terminada la celebración la Comunidad de Monjas Contemplativas ofrecieron un pequeño refrigerio, que supuso un momento de agradable encuentro entre hermanos.

A partir de ahora Fray Gregorio, como fraile ordenado, seguirá en la Provincia de Bética con su fructífera e incansable labor pastoral en el Santuario de la Patrona de Canarias, Nª. Sª. de la Candelaria; seguirá predicando que el hombre, en Jesús, se encuentra con el Dios bueno que le brinda a compartir su propia vida.