Córdoba celebra las promesas perpetuas de dos miembros de la Fraternidad Laical de Santo Domingo de Scala Coeli y P. Posadas
Dña. Amalia Colón Cano OP y D. Manuel Antonio Navío Perales OP
Dentro de la celebración eucarística del Domingo de Pentecostés, el pasado domingo 23 de mayo tuvo lugar el acto de otorgamiento de promesas perpetuas, por parte de Amalia Colón Cano y Manuel Antonio Navío Perales, miembros de la Fraternidad de Santo Domingo de Scala Coeli y P. Posadas, de Córdoba.
Comenzó el acto el presidente de la Fraternidad, Cristóbal Arellano, el cual destacó la presencia especial del Espíritu Santo en esta celebración de las promesas perpetuas de Amalia y Manolo, que suponía para ellos participar de la misión apostólica de la Orden de Predicadores, según su condición de laicos dentro de la Iglesia. Ello también suponía un compromiso para la Fraternidad, ya que como comunidad compartimos oración y estudio.
La celebración litúrgica, la cual fue preparada y contó con la participación en sus distintas partes de los miembros de la Fraternidad laical, estuvo presidida por el asistente religioso de la misma, fray José Antonio Segovia, O.P., el cual, en su homilía recordó que este acto de realizar promesas y, además, públicamente, no todas las personas actualmente están dispuestas a hacerlo. Pero debemos de fijarnos en Dios, el cual promete y cumple lo que promete. El Espíritu Santo es la promesa y el cumplimiento de todas las promesas de Dios. Tener fe en Él es saber que va a cumplir todas las promesas, en Jesucristo, y a favor nuestro. Creer es estar atentos a las promesas de Dios.
Relacionándolo con la celebración de este Domingo, manifestó igualmente que “la gracia de Pentecostés consiste en recibir la gracia de la fe para después poder entregarla”.
“Las personas, como Amalia y Manolo, que se comprometen públicamente, son personas de fe que son capaces de mirar con profundidad lo que pasa y ver que Dios tiene una mirada especial, son personas que viven en lucha por la vida, por la esperanza, por la reconciliación, por el amor y por la fraternidad”.
Finalizó manifestando que el carisma de Santo Domingo, cuyo 800 años de su muerte estamos celebrando, es decir, el carisma de la predicación sigue vigente en estos hermanos como laicos con la misión de transformar el mundo.
A continuación se inició propiamente el acto del compromiso perpetuo de pertenencia a la Orden de Predicadores como miembros de la Fraternidad de Santo Domingo de Scala Coeli y P. Posadas, de Córdoba, de Amalia y Manolo el cual fue prestado ante el Presidente de la Fraternidad y el Asistente Religioso, en representación del Maestro de la Orden de Predicadores.
Finalizado el acto, Amalia y Manolo recibieron las felicitaciones tanto de sus familiares que pudieron acompañarles, de los frailes de la Comunidad de Scala Coeli, así como de los miembros presentes de la Fraternidad laical y de las personas asistentes al acto que completaban en su totalidad el aforo que, por las circunstancias actuales, estaba delimitado.
Antonio-Jesús Rodríguez Hernández
Vocal de comunicación.
Fraternidad Santo Domingo Scala Coeli – Córdoba.