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Noticia

La iglesia de San Pablo se llena para escuchar el IV Concierto de Marchas Procesionales

8 de abril de 2025

Más de mil personas abarrotan el templo dominico para escuchar un concierto con obras de compositores castellanos y andaluces

La iglesia de San Pablo, en Valladolid, acogió el sábado 5 de abril el IV Concierto de Marchas Procesionales, un evento organizado con entrada libre que congregó a más de mil personas. Poco después de las 18:30 h, los organizadores se vieron obligados a cerrar las puertas del templo ante la gran afluencia de público. Los pasillos, capillas laterales y todos los bancos estaban completamente ocupados, con asistentes de pie en cada rincón.

El concierto contó con la participación de la Banda Municipal de Valladolid y del Coro EMMVA, que ofrecieron un programa dividido en dos partes, centrado en marchas procesionales de la Semana Santa castellana y andaluza. En la primera parte, dirigida por el titular de la Banda, Ángel Páez, se interpretaron obras de compositores destacados como Francisco José Sánchez (Soledad al Pie de la Cruz), Eugenio Gómez y Pablo Toribio (Padre Jesús Nazareno), Alejandro Merlo Luquero (En mi recuerdo, Esperanza) y Eugenio Gómez García (Virgen de las Angustias).


La segunda parte estuvo dedicada a las composiciones del reconocido músico granadino Víctor Manuel Ferrer Castillo
, natural de Ogíjares, cuya obra ha alcanzado gran popularidad en la Semana Santa española. Bajo su dirección, se interpretaron algunas de sus piezas más emblemáticas, como Concha, La última noche – Poema Sinfónico, Mi Amargura y Virgen de las Nieves Coronada. Esta última fue interpretada con la colaboración especial del Coro EMMVA, dirigido por Natalia Abad, y supuso uno de los momentos más emotivos del concierto.

El público, visiblemente emocionado, respondió con una larga ovación que dio lugar a un bis final, cerrando así un acto musical de gran belleza, austeridad y solemnidad. Muchos de los asistentes destacaron la calidad de las interpretaciones y la atmósfera sobrecogedora vivida en el templo, que pocas veces se ha visto tan concurrido.