Sara Canteli, la joven pintora del MJD de España, inaugura la exposición individual “Énosis” en Oviedo

Han definido a la artista como “la joven promesa de la pintura asturiana”

  Desde el próximo jueves, 6 de febrero, hasta el 6 de abril, la sede del Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo acogerá la exposición de la pintora asturiana Sara Canteli, titulada Énosis, un conjunto de pinturas e instalaciones que se aglutinan en torno a tres colecciones: "Magma", "Pandora" y "Lucca”.

  Sara, que pertenece al grupo Esnalar del Movimiento Juvenil Dominicano, es una apasionada de la pintura. Tiene claro que haga lo que haga, en su día a día la pintura tendrá que estar presente: “Mis cuadros son lo que soy yo”.

El color como herramienta narrativa

  Para Cristina Expósito, historiadora del arte experta en color de la Universidad Complutense de Madrid y también miembro del MJD, las obras de Sara tienen gran profundidad creativa: “Tienen un trabajo propio de reflexión, y en esta exposición se va a poder observar claramente con el acompañamiento musical que tienen las obras”. En sus obras el color se convierte en la herramienta narrativa, utiliza una paleta cromática muy variada, no se centra en una determinada gama de colores. Según Expósito, además, “Sara utiliza varios elementos para jugar con las texturas de los lienzos, utilizando cuerdas, hilos o elementos circulares de madera para pintar sobre ellos, generando así luces y sombras que hacen que la percepción que el espectador tiene del lienzo varíe. No es un lienzo plano ni una superficie uniforme”. Para Cristina, Sara no deja indiferente al espectador “porque su obra tiene una estimulación estética muy potente”. 

  Canteli afirma que no quiere obligar al espectador a interpretar nada en sus obras: “El hecho de estar queriendo contar una historia, mostrar sus entrañas, es poder recrearlo sin tener ningún tipo de forma o atadura. El único fin es el que el propio espectador pueda interpretar, tanto para bien, como para mal”.

Todo en ella es luz

  Fr. Ricardo Aguadé, coordinador de pastoral del colegio de los Dominicos en Oviedo, donde ha estudiado Sara, cuenta que tiene mucha relación con su familia. Reconoce que Sara es todo un referente para los adolescentes y jóvenes que la quieren con sincero afecto: “Desde hace ya tiempo Sara Canteli colabora estrechamente como catequista y educadora en los grupos de confirmación y comunidades de jóvenes de la parroquia Santo Domingo de Guzmán. Desde muy pequeña sus dos grandes pasiones son la pintura y la música. Pero sobre todo la pintura. Ambas son su manera de comprometerse con un mundo que para ella es reflejo de la belleza de Dios y demanda belleza y justicia”. Para el dominico los rasgos que definen mejor la personalidad de la artista son “la bondad, la honestidad, la fidelidad y el compromiso. Todo en ella es luz”.

Una obra repleta de magia

  Para Fr. Félix Hernández, dominico, doctor en Teología y pintor “La obra de Sara Canteli está repleta de magia, de un misterio que se deja atrapar por el color y las formas. Sobre una base de tonos oscuros, la artista presenta un estallido de luz y pigmentos cálidos que trascienden el soporte, proyectándose sobre el espectador, derramándose sobre él y transportándolo a un ámbito que tiene tanto de cósmico como de íntimo y orgánico. Colores intensos y puros que se relacionan y funden sin ensuciarse, fuego, sangre, luz y oscuridad; formas suaves y pinceladas decididas; todo ello convive con naturalidad y fluye al ritmo de una melodía interior que inunda el lienzo”.

  La obra de Canteli tiene un presente brillante y un futuro todavía más prometedor. En un artículo publicado recientemente por el diario La Nueva España, Ángel de la Fuente Martínez habla de Canteli como “la joven promesa de la pintura asturiana”.