Tres dominicos creados cardenales: una llamada al servicio, la unidad y la fraternidad
Fr. Jean-Paul Vesco, Francis Leo y Fr. Timothy Radcliffe representan la misión dominicana en el Consistorio del 8 de diciembre
La Basílica de San Pedro fue testigo de un emotivo momento en el décimo consistorio del Papa Francisco, celebrado el pasado 8 de diciembre de 2024, durante la solemnidad de la Inmaculada Concepción. En este evento, 21 nuevos cardenales fueron creados. Entre ellos había tres miembros de la Orden de Predicadores (dominicos): Jean-Paul Vesco, arzobispo de Argel; Francis Leo, arzobispo de Toronto, y Timothy Radcliffe, teólogo y exmaestro de la Orden.
Una homilía que invita a la unidad
En su homilía, el Papa Francisco subrayó la importancia de la humildad y la fraternidad como pilares esenciales en el camino cristiano. Recordó que la búsqueda del prestigio y del poder no debe desviar a los discípulos de Cristo, quienes están llamados a centrarse en el verdadero "perno" de sus vidas: Jesús.
El Papa instó a los nuevos cardenales a reflexionar sobre el estado de su corazón y cuestionarse si están realmente siguiendo el camino de Cristo. "No se dejen deslumbrar por el encanto del prestigio ni por la seducción del poder", afirmó. En lugar de eso, les animó a poner a Jesús en el centro de sus vidas y a caminar por las calles, encontrarse con los demás, y cuidar a los más frágiles.
El cardenalato: inmersión en la vida de los demás
El Pontífice destacó que el servicio cardenalicio no debe significar aislamiento, sino una inmersión continua en las luchas, heridas y desencantos de las personas. Siguiendo el ejemplo de Jesús, los cardenales están llamados a curar las heridas, aligerar las cargas y romper las cadenas de la esclavitud, siendo testigos de fraternidad y constructores de unidad.
Además, el Papa señaló la necesidad de superar la "competencia corrosiva" y trabajar por la comunión y la unidad. Este espíritu, según Francisco, es esencial en una sociedad obsesionada con las apariencias y los primeros puestos.
Tres cardenales dominicos para un mundo dividido
La creación de tres cardenales dominicos subraya el compromiso de la Orden de Predicadores con la misión evangelizadora y el servicio a la Iglesia. Cada uno de ellos aporta un enfoque único: Jean-Paul Vesco, con su experiencia en diálogo interreligioso; Francis Leo, con su dedicación a las comunidades multiculturales, y Timothy Radcliffe, con su profundo pensamiento teológico.
Este consistorio es un recordatorio del llamado universal a caminar juntos, promoviendo la paz, la justicia y la unidad en un mundo marcado por las desigualdades y conflictos.
Una Iglesia de unidad y encuentro
El mensaje del Papa resuena como una invitación no solo para los nuevos cardenales, sino para toda la Iglesia, a abrazar la humildad y construir una verdadera fraternidad en Cristo. La Orden de Predicadores celebra este momento como un testimonio del compromiso con los valores evangélicos en el mundo contemporáneo.