Un hombre irrumpe en una boda en la iglesia de San Pablo de los dominicos de Valladolid
La ceremonia tuvo un final feliz y todo quedó en un pequeño susto
Se estaba celebrando una boda, como es habitual cada sábado, en el céntrico templo de los dominicos de San Pablo, en Valladolid, cuando en el momento de la paz se escucharon unas voces que venían del fondo y unos invitados de la boda salieron corriendo en dirección a las voces.
Un joven de veintitantos años, con voces no inteligibles y empujones a los que le trataban de retener, logró escabullirse y subir al presbiterio.
Según algunos medios de comunicación, se trata de un joven de 22 años, con antecedentes por alteración del orden público, que ha entrado en la iglesia al grito de "Alá es grande”.
El fraile dominico que presidía la celebración relata así ese preciso momento: “Yo al ver hasta donde había llegado, y desconociendo sus intenciones, intenté poner a salvo el cáliz y la patena pero él ya se había cogido de un extremo del mantel del altar y dado un tirón. El cáliz cayó sobre la mesa y lo demás fue todo por el suelo: atril, misal, ritual… la patena quedó justo en el borde del altar”. No iba armado y no agredió al sacerdote que presidía la celebración.
Los invitados a la boda continuaron en su intento por retener al joven, cayendo por la escalera del presbiterio en medio de voces y gritos, golpes, gente corriendo por los bancos, lágrimas.
De inmediato apareció la Policía Nacional que lo pudo detener y sacar del templo. Posteriormente los agentes revisaron todo el templo en búsqueda de posibles explosivos, pero no encontraron nada y la situación se fue tranquilizando.
El fraile que presidía trató de comunicar a todos un poco de paz y sosiego: “Con la música de fondo del grupo musical que armonizaba la boda, logramos cierta paz para poder finalizar la ceremonia…”.
Finalmente, todo quedó en un susto y el enlace matrimonial se celebró de manera feliz.