Fray Xabier Gómez OP, obispo de Sant Feliu, comparte su vivencia del Triduo Pascual en ‘Cruzando Fronteras’
El obispo dominico reflexiona sobre su ministerio, el Triduo Pascual y los desafíos pastorales en una entrevista con Fernando Cordero, SS.CC.
El programa Cruzando Fronteras, dirigido por el sacerdote Fernando Cordero SSCC, ha contado con la participación de fray Xabier Gómez OP, recientemente nombrado obispo de Sant Feliu de Llobregat (Barcelona). En una entrevista cercana y profunda, fray Xabier comparte su experiencia espiritual al recibir la noticia de su nombramiento, así como las claves de su servicio episcopal, marcado por la humildad y el carisma dominicano.
La conversación se desarrolla en el contexto del milenario del Monasterio de Montserrat, un símbolo espiritual de referencia en Cataluña. Fray Xabier expresa su sorpresa y conmoción al ser llamado al episcopado, y lo vincula con el diálogo que Jesús resucitado mantiene con Pedro: “¿me amas?”. Desde esa interpelación, asume su nueva misión con el lema Humilitas, como signo de una espiritualidad abierta a Dios y cercana al pueblo.
El obispo dominico subraya el papel de los migrantes en la renovación de la Iglesia, agradeciendo su presencia en medio del “invierno demográfico” que vive Europa. En ese sentido, destaca la importancia de promover una Iglesia hospitalaria, que abrace la diversidad y construya comunión en la diferencia.
Durante la entrevista, también se abordan temas como la pastoral obrera, la pastoral de migraciones y la pastoral vocacional, ámbitos en los que el nuevo obispo desea trabajar activamente. Además, señala como una prioridad el cultivo de la interioridad y la escucha de la Palabra de Dios, elementos esenciales de la espiritualidad dominicana.
Un momento especialmente significativo de la entrevista es su reflexión sobre el Triduo Pascual, que articula desde las claves del amor fraterno, el servicio y la esperanza. Del Jueves Santo, destaca el gesto de Jesús lavando los pies a sus discípulos como núcleo de la misión de la Iglesia. En el Viernes Santo, se detiene en el misterio del sufrimiento y de la cruz, como lugar donde Dios responde al mal con amor incondicional. Y en el Sábado Santo, subraya la figura de María en su soledad y la valentía de las mujeres que acompañaron hasta el final a Jesús. Una vivencia que conecta con el acompañamiento a los jóvenes que sufren, especialmente en el ámbito de la salud mental.
La Vigilia Pascual es presentada como culmen y centro de la vida cristiana. Para fray Xabier, la resurrección se traduce en señales concretas de vida nueva: la pastoral en las cárceles, el acompañamiento a personas marginadas, la lucha por la dignidad humana y el diálogo interreligioso.
Además, el obispo comparte su experiencia en el espacio O_LUMEN, impulsado por los dominicos, como un lugar donde el arte abre caminos hacia la trascendencia. Desde ahí, apuesta por una Iglesia que dialogue con la cultura contemporánea, y que sepa comunicar la belleza del Evangelio.
En sus palabras finales, invita a las familias a vivir el Triduo Pascual con profundidad, compartiendo juntos la fe y creando espacios de reconciliación y oración. Muestra su cruz pectoral hecha con madera de caminos migratorios, como símbolo de una Iglesia que camina con los últimos.