May
Homilía VII Domingo de Pascua
Año litúrgico 2012 - 2013 - (Ciclo C)
“ No os alejéis de Jerusalén ”
Evangelio para niños
La Ascensión - Lucas 24, 46-53
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: - Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se predicará la conversión y el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Y vosotros sois testigos de esto. Yo os enviaré lo que mi Padre ha prometido; vosotros quedaos en la ciudad, hasta que os revistáis de la fuerza de lo alto. Después los sacó hacia Betania, y levantando las manos los bendijo. Y mientras los bendecía, se separó de ellos (subiendo hacia el cielo). Ellos se volvieron a Jerusalén con gan alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios
Explicación
Los amigos de Jesús ya sabemos que él no es como una nave espacial, que terminada su aventura en la tierra, asciende entre las nubes. Lo que dice el evangelio de hoy es, que Jesús Resucitado comparte la VIDA de su Padre: está junto a él. Y para explicarlo, le hacen ascender, porque según el sentir del pueblo judío, Dios habita en las alturas. Pero nosotros sabemos que Dios está donde hay amor. Arriba, abajo o en medio, ¿no ?
Dibujo realizado por: Fr. Félix Hernández Mariano ( descargar la imagen )
Evangelio dialogado
Te ofrecemos una versión del Evangelio del domingo en forma de diálogo, que puede utilizarse para una lectura dramatizada.
ASCENSIÓN DEL SEÑOR – “C” (Lc. 24, 46-53)
NARRADOR: En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:
JESÚS: Así estaba escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se predicará la conversión a todos los pueblos, empezando por Jerusalén.
DISCÍPULO1: Señor, ¿Y cómo se va a llevar a cabo esto?
JESÚS: Vosotros sois mis testigos.
DISCÍPULO2: ¿Y si no nos quieren creer?
JESÚS: Yo os enviaré lo que mi Padre ha prometido.
DISCÍPULO1: ¿Y qué tenemos que hacer nosotros?
JESÚS: Vosotros quedaos en la ciudad, hasta que os revistáis de la fuerza que os enviará mi Padre.
NARRADOR: Después los sacó hasta Betania y, levantando las manos los bendijo. Y mientras los bendecía se separó de ellos, subiendo hacia el cielo.
DISCÍPULO1: Oye, chicos… ¿qué está sucediendo?
NARRADOR: Ellos se postraron ante él y se volvieron a Jerusalén con gran alegría.
DISCÍPULO2: Ahora tenemos que proclamar que ¡El Señor vino a salvarnos!, que Jesús ¡ha resucitado! Tenemos que dar testimonio de todo lo que hemos vivido con el Maestro.
NARRADOR: Y desde aquel día ya no tuvieron más miedo y comenzaron a predicar en el templo bendiciendo a Dios.
Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández