Ago
Homilía La Asunción de la Virgen María
Año litúrgico 2014 - 2015 - (Ciclo B)
“ ¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ”
Introducción
Los misterios de la Virgen María están estrechamente ligados al Plan Universal de Salvación. La “Virgen María” no es una diosa complementaria que Dios haya colocado junto a Él para ser venerada y reverenciada por sus devotos. Su función y sentido dentro de la espiritualidad cristiana se cifra en ser “modelo” de fidelidad a los planes de Dios y, por ello, ser “madre” y “maestra” en el acontecer diario de cada cristiano. Los misterios de María son incomprensibles sin una conexión inmediata y directa con el misterio de Cristo y sin una referencia clara y precisa a la historia de los cristianos. En este sentido el misterio de la Asunción de María sólo es comprensible desde la muerte, resurrección y glorificación de Cristo y desde las aspiraciones más congénitas del ser humano que espera y ansía sobrevivir después de la muerte. Su mensaje podría cifrarse en estas expresiones: Vale la pena vivir, sufrir, trabajar y afrontar cualquier tipo de penalidades y miserias, porque todo ello tendrá un final feliz y dichoso.
La Asunción de María sabe a “Fiesta de la Humanidad” glorificada por el esfuerzo humano y por la participación de los méritos de Cristo. En esta “Fiesta” la vida de los más pobres y sufridos de este mundo aparece iluminada y transformada con un colorido nuevo mediante ese inmenso haz de luz que, desde el misterio de Cristo, se proyecta sobre el sencillo quehacer humano.