Ene
Homilía III Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2020 - 2021 - (Ciclo B)
“ Venid conmigo y os haré pescadores de hombre ”
Evangelio para niños
Los primeros discípulos - Marcos 1, 14-20
Cuando arrestaron Juan, Jesús se marchó a Galilea a proclmar el Evangelio de Dios, decía: - Se ha cumplido el plazo, está cerca el Reino de Dios: Convertíos y creed la Buena noticia. Pasando junto al lago de Galilea, vio a Simón y a su hermano Andrés, que eran pescadores y estaban echando el copo en el lago. Jesús les dijo: - Venid conmigo y os haré pescdores de hombres. Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron. Un poco más adelante vio a Santiago, hijo del Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca repasando las redes. Los llamó, dejaron a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros y se marcharon con él.
Explicación
Los primeros amigos de Jesús, a quienes llamó para formar grupo, eran pescadores y se llamaban Pedro, Andrés, Santiago y Juan. Jesús les ofreció una tarea especial cuando les dijo: Venid conmigo y seréis “pescadores de personas”. Pescar personas quiere decir sacar a personas de situaciones difíciles. ¿Quieres ser tú pescador o pescadora de personas?
Dibujo realizado por: Fr. Félix Hernández Mariano ( descargar la imagen )
Evangelio dialogado
Te ofrecemos una versión del Evangelio del domingo en forma de diálogo, que puede utilizarse para una lectura dramatizada.
NARRADOR: Os vamos a contar una historia de Jesús. Es la historia de cómo Jesús eligió a los primeros amigos. El hecho ocurrió en un lugar que se llamaba Galilea. Resulta que el rey Herodes, que era rey de Judea, había mandado encarcelar a Juan porque éste le decía que tenía que cambiar y ser bueno. ¡Atención, Jesús se acerca!
JESÚS: ¡Buenos días, amigos! Escuchad, se ha cumplido el plazo, está cerca el Reino de Dios. Convertíos y creed la Buena Noticia.
SIMÓN: Ya teníamos ganas de verte, Jesús.
ANDRÉS: Pensábamos que no vendrías a buscarnos.
JESÚS: Ha llegado el momento, venid conmigo y os haré pescadores de hombres.
NARRADOR: Simón y Andrés inmediatamente dejaron las redes y los siguieron. Y un poco más adelante vio a Santiago, hijo de Zebedeo y a su hermano Juan. Les dijo:
JESÚS: ¡Buenos día. amigos! Venid. os haré pescadores de hombres.
NARRADOR: Al instante dejaron a su padre con los jornaleros en la barca y se marcharon con él.
SIMÓN: Maestro, eso de pescar hombre lo veo un poco liado.
ANDRÉS: A los peces no necesitamos convencerles, pero a los hombres...
JUAN: ¿Qué podemos decirles Jesús? Tú hablas muy bien y nosotros fatal.
JESÚS: Importa más que ellos vean cómo vivís, que las palabras que les digáis.
SANTIAGO: ¡Es muy difícil vivir como vives tú!
JESÚS: No es tan difícil, vosotros habéis dejado mucho para venir conmigo.
SIMÓN: ¿Quién puede negarse a tu llamada?
JESÚS: Todos los que tienen la vida llena de cosas que les atan demasiado.
NARRADOR: Jesús pensaba en los esclavos del vídeo, la videoconsola, el ganar más dinero, el deporte mal entendido, la vida fácil..., etc...
JESÚS: ¿Te das cuenta, Simón? Las palabras solas no convencen.
NARRADOR: Jesús y sus discípulos abandonaron el lugar y se dirigieron a las ciudades cercanas.
Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández