Jun
Homilía Corpus Christi
Año litúrgico 2009 - 2010 - (Ciclo C)
“ Dadles vosotros de comer ”
Evangelio para niños
Multiplicación de los panes - Lucas 9, 11b-17
En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar a la gente del Reino de Dios, y curó a los que lo necesitaban. Caía la tarde y los doce se acercaron a decirle: - Despide a la gente; que se vayan a las aldeas y cortijos de alrededor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado. El les contestó. - Dadles vosotros de comer. Ellos replicaron: - No tenemos más que cinco panes y dos peces; a no ser que vayamos a comprar de comer para todo este entío. (Porque eran unos cinco mil hombres). Jesús dijo a sus discípulos: - Decidles que se echen en grupos de unos cincuenta. Lo hicieron así, y todos se echaron. El, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición sobre ellos, los partió y se los dio a los discípulos para que se los sirvieran a la gente. Comieron todos y se saciaron, y cogieron las sobras: doce cestos.
Explicación
El evangelio de hoy nos relata algo asombroso y admirable. Jesús, siente cómo la multitud que le sigue, está a punto de desmayarse por el hambre y el cansancio, porque llevaban días sin comer. Y como les hablaba del Reino de Dios, hizo un gesto que les ayudaría a recordar, para siempre, la importancia del COMPARTIR en la construcción de ese Reino. Entre el gentío pudieron reunir cinco panes y dos peces. Y Jesús dando gracias a Dios, su Padre, le bendijo y mandó a sus discípulos repartir, entre todos, lo poco que tenían. Comieron de sobra . Cuando se comparte lo que se tiene, a nadie le falta lo necesario. Es un milagro.
Dibujo realizado por: Fr. Félix Hernández Mariano ( descargar la imagen )
Evangelio dialogado
Te ofrecemos una versión del Evangelio del domingo en forma de diálogo, que puede utilizarse para una lectura dramatizada.
DOMINGO DEL CUERPO Y SANGRE DE CRISTO -C- (Lc 11b-17)
Narrador: En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar a la gente del Reino de Dios, y curó a los enfermos. Caía la tarde y los discípulos se le acercaron a decirle:
Discípulo1: Despide a la gente, Señor, que vayan a las aldeas y a las posadas de alrededor a buscar alojamiento y comida, porque aquí estamos en descampado.
Jesús: Dadles vosotros de comer.
Discípulo2: No tenemos más que cinco panes y dos peces, a no ser que vayamos a la tienda y compremos para todo este gentío.
Narrador: Eran unos cinco mil hombres los que se habían juntado para oír a Jesús.
Jesús: Decidles que se acomoden en grupos de cincuenta.
Narrador: Lo hicieron así, y todos se sentaron sobre el suelo.
Discípulo1: Aquí tienes los panes y los peces, Maestro.
Narrador: Él, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición sobre ellos, los partió y se los dio a los discípulos para que los repartieran a la gente.
Discípulo2: Obedecimos, pues, a Jesús y repartimos entre todos los cinco panes y los dos peces.
Narrador: Comieron todos y se saciaron, y los discípulos recogieron las sobras.
Discípulos: Y ha sobrado nada menos que...¡doce cestos!
Narrador: Jesús hizo un gran milagro a la vista de todos, pero contó con la ayuda de aquellos pocos panes y peces ofrecidos. Los amigos de Jesús compartieron y entonces la comida se multiplicó.
Elaborado por: Fr. Emilio Díez Ordóñez y Fr. Javier Espinosa Fernández