Evangelio del día
Vigésimo cuarta Semana del Tiempo Ordinario

Del día 13 al 19 de Septiembre de 2020

Días de la semana

Hasta setenta veces siete... Hasta setenta veces siete...

No es fácil el perdón, como tampoco es fácil el amor. Pero hace feliz. El auténtico amor y el auténtico perdón son gratuitos. Por eso su alcance es universal. Lo que tiene precio es siempre limitado. Y lo más interesante: el perdón no es un favor que hacemos el ofensor, es un bien que nos hacemos a nosotros. El primer beneficiario del perdón es el que perdona

MartínFray Martín Gelabert Ballester
Convento de San Vicente Ferrer (Valencia)

María estaba junto a la cruz... María estaba junto a la cruz...

Santoral: Nuestra Sra. la Virgen de los Dolores

Como símbolo de la Iglesia, los cristianos se ven reflejados en María, porque es el mejor ejemplo de seguimiento de Cristo sobre la tierra, y es a la vez signo de consuelo y de esperanza cierta para el pueblo que peregrina hacia el cielo. Nos invita a seguir sus pasos sin rechazar el sufrimiento, aceptándolo como una forma de estar nosotros también al pie de la cruz, prolongando como Iglesia la obra de reconciliación humano-divina que él vino a realizar y que continúa realizando a través de sus discípulos

EmilioFray Emilio García Álvarez O.P.
Convento de Santo Tomás de Aquino (Sevilla)

Ni habéis bailado, ni habéis llorado Ni habéis bailado, ni habéis llorado

Santoral: Santos Cornelio y Cipriano

Oremos para que se despierte en nuestro interior un sentido de conversión, que nuestra mirada se vuelva atenta a los acontecimientos de Dios y del mundo, y oremos también, para que nuestra resistencia se desvanezca por medio del amor que Dios nos tiene, aliento para los abatidos, y esperanza para los pobres

AlexisFray Alexis González de León O.P.
Convento de San Pablo y San Gregorio (Valladolid)

Anunciando la Buena Noticia del Reino de Dios Anunciando la Buena Noticia del Reino de Dios

Santoral: San Juan Macías

Dios es un Rey Padre que nos ama entrañablemente como lo prueba el enviarnos a su propio Hijo Jesús para indicarnos el camino a seguir, que es el camino del amor, porque Dios es Amor. El camino que nos lleva a disfrutar de la felicidad limitada en esta tierra y de la felicidad total después de nuestra resurrección

ManuelFray Manuel Santos Sánchez O.P.
Convento de Santo Domingo (Oviedo)