Evangelio del día
Decimotercera semana del Tiempo Ordinario
Del día 28 de Junio al 4 de Julio de 2020
“ El que pierda su vida por mí... ”
Días de la semana
XIII Domingo del tiempo ordinario Ciclo A
“El que pierda su vida por mí...”
Baldomero López Carrera
Introducción Lecturas Comentario bíblico Pautas para la homilía Infantil
Hoy Mateo nos diría que la fidelidad al Maestro y al Reino de Dios no es compatible con la fidelidad a nuestro modo de vida actual, en el que la ganancia económica de unos pocos está por encima de todo y a costa de la vida de muchísimas personas en nuestro planeta
Santos Pedro y Pablo
"Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo"
Sor Mª Ángeles Martínez, OP
El cuerpo de Cristo se edifica sobre la herida de la cobardía, de la búsqueda de poder y de prestigio, todos sin excepción buscaron los primeros lugares y lucharon por conseguirlos; las mochilas de los discípulos están vacías de contenido, pero el perdón y la misericordia las llenó de audacia y compasión y nació la Iglesia como la esposa fiel que recorre el camino de la humanidad sanando y besando heridas
"¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?"
Fray Juan José de León Lastra O.P.
No podemos desconfiar del Dios en quien decimos creer. En medio de la tempestad hay que buscarle, y contar con él, es el momento de tener conciencia de que no vivimos solos, él está en nuestras vidas. Está para darnos valor y no dejarnos acobardar; para darnos esperanza, no dejarnos aplastar por el temor
"¿Qué tenemos que ver nosotros contigo, Hijo de Dios?"
Fray Alexis González de León O.P.
En la vida llegamos a vivir un estado de perversidad, cuando dejamos que el mal entre en nosotros. Y hemos de procurar que Dios se haga presente en nuestra vida para echar los demonios fuera de nosotros
"Ponte en pie, coge tu camilla y vete a tu casa"
Hna. Águeda Mariño Rico O.P.
La compasión que libera y sana se acerca a la persona y acoge toda la complejidad y el sufrimiento de su situación. Pone en marcha procesos, las capacidades de cada uno, acompaña desde la comunidad y le integra socialmente, trata con dignidad y respeto, ayuda a superar las limitaciones y anima a tomar la propia vida en sus manos y proyectar, realizarse, sentirse útil y capaz. “Ponte en pie, coge tu camilla y vete a tu casa”
Santo Tomás, apóstol
"Señor mío y Dios mío"
Fray Manuel Santos Sánchez O.P.
¿Quién no se ve reflejado en el dubitativo y creyente Santo Tomás? A veces, las dudas llaman a nuestra puerta y hemos de pedir a Jesús que venga en nuestra ayuda, que refuerce nuestra confianza en él y nos mostrará sus heridas para que podamos confesar con Santo Tomás: “¡Señor mío y Dios mío!”
San Valentín de Berrio-Otxoa
"¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos y los tuyos no?"
D. Félix García O.P.
Dios está con nosotros, está a nuestro lado y, mientras permanezca con nosotros, no podemos entristecernos con ayunos y penitencias. Día llegará en el que sintamos que nos hemos apartado de Dios y entonces necesitaremos ayunar y hacer penitencia hasta sentirnos nuevamente acogidos por Él. Siempre teniendo en cuenta que el amor de Dios está con nosotros, aunque nos queramos apartar de Él