Evangelio del día
Cuarta Semana del Tiempo Ordinario - Año Impar
Del día 29 de Enero al 4 de Febrero de 2017
“ Bienaventurados los pobres en el espíritu ”
Introducción a la semana
Termina la lectura de la carta a los Hebreos con una larga exhortación. Se parte del recuerdo de los que vivieron con fe grandes tribulaciones. Ese recuerdo debe ser estímulo para mantener la constancia en las actuales circunstancias difíciles de la comunidad creyente, no viendo en el sufrimiento un castigo merecido, sino una ocasión de la que Dios se sirve para aquilatar nuestra fidelidad a sus designios. La conducta de los que creen en él debe expresarse, por un lado, en el amor fraterno que conduce a vivir en paz con todos, y, por otro, en la relación íntima con él, que se nos revela en Jesucristo mucho más cercano que en la antigua alianza. Dicho en el lenguaje sacerdotal propio de esta carta: unidos a Cristo, nuestro único mediador, hemos de ofrecer a Dios un “sacrificio de alabanza”, que consiste en alabar su nombre, es decir, en confesar que es misericordioso y fiel y, a la vez, en entregarnos al servicio de nuestros hermanos, como hizo Jesús. Su mediación es nuestra garantía: “Él realizará en nosotros lo que es de su agrado por medio de Jesucristo; a él la gloria por los siglos de los siglos. Amén”.
Días de la semana
Cuarto Domingo de Tiempo Ordinario Ciclo A
“Bienaventurados los pobres en el espíritu”
Fray Juan José de León Lastra O.P.
Introducción Lecturas Comentario bíblico Pautas para la homilía Infantil
El mensaje de Jesús no es una ley a la que someterse, que cumplir; sino un programa para ser felices; es decir para que el ser humano consiga lo que más desea, la felicidad.
"Ellos le rogaban que se marchase de su país"
Fray Hermelindo Fernández Rodríguez
¿Me preocupo de pedir y alcanzar la liberación de “toda atadura”? La señal de que voy liberándome o no, es que soy más o menos liberador.
San Juan Bosco
"Tu fe te ha curado"
Fray Manuel Santos Sánchez O.P.
Los hombres del siglo XXI, ante nuestros distintos y variados padecimientos y enfermedades, si acudimos a Él, Jesús, el que nos ama, siempre sanará nuestras dolencias con la misma y única medicina: “No temas, basta que tengas fe”.
"Se extrañó de su falta de fe"
Fr. Jesús Duque O.P.
Quien pone el punto de mira en Dios sabe que Él su paz, como fuerza en el camino y como remate del mismo. El creyente aprende así la mejor lección de la vida: vivir es acreditar, paso a paso, que somos portadores de paz y salvación
Presentación del Señor
"¿Quién es ese Rey de la gloria? Es el Señor"
D. Juan Jesús Pérez Marcos O.P.
La contemplación es una cualidad que hay que ejercitarla día a día; no se levanta uno sabiendo contemplar, lo mismo que no nacemos sabiendo andar. La contemplación requiere voluntad, dedicación, esfuerzo, sacrificio… es aprender a dejarse abrazar por el Espíritu Santo.
Beato Pedro de Ruffía O.P.
"Jesucristo es el mismo hoy, ayer y para siempre"
Monjas Dominicas Contemplativas
¡Su Misericordia es la raíz de nuestra confianza! Porque sé que si estoy herido, busca ser mi medicina; si estoy cansado, es descanso; si me desanimo me infunde esperanza; si estoy en peligro, es mi refugio.
Santa Catalina de Ricci
"El Señor es mi pastor, nada me falta"
Hna. Carmen Román Martínez O.P.
Cumplir la voluntad de Dios que resucitó a Jesús, Pastor de las ovejas es la única manera que tiene el discípulo de asumir la vida y el destino del Maestro.