Evangelio del día
Décima Semana del Tiempo Ordinario

Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia

"Mujer, ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu madre"
D. Carlos José Romero Mensaque, O.P.

En esta fiesta de la Bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia, acerquémonos en oración y con devoción a Quien, con su Sí, disipó las brumas del mal de origen y nos posibilitó una nueva Esperanza.

"Vosotros sois sal... luz..."
Hna. Ana Belén Verísimo García OP

Somos sal y luz, pero ¿Qué sal y qué luz? Si nuestra vida tiene el sabor de las buenas obras y la luz que presenta el Amor de Dios, entonces, sí somos los discípulos del Maestro, somos los amigos de Dios.

Beatas Diana y Cecilia

"He venido a dar plenitud"
Fray Manuel Santos Sánchez O.P.

La orientación general de la plenitud que busca Jesús se va a centrar en el amor y en todo lo que el amor pida. Podemos citar en este sentido a San Pablo: “Quien ama cumple la ley”. La plenitud de la ley es el amor.

Jesucristo Sacerdote

"Que el amor que me tenías esté en ellos"
Fr. Antonio Bueno Espinar O.P.

Aquí estamos presentes nosotros, que hemos creído en el testimonio apostólico. No solamente hemos dicho que sí, sino que hemos sido introducidos en la unidad: ser unos como él y el Padre son uno. Ser perfectamente uno. Cultivar la unidad.

Beato Juan Domínici

"Pero yo os digo"
Sor María Rosario Botella O.P.

El Señor nos sitúa siempre ante nuestra propia conciencia, nos conduce a conocer nuestro corazón, en la profundidad de nuestro corazón vemos de donde salen todos los deseos, buenos y malos, nos lo recuerda Jesús.

San Bernabé

"Que vuestro hablar sea sí, sí, no, no"
Fr. Isidoro Crespo Ganuza O.P.

La vida es transparente en la gente de palabra, a la que le basta decir sí, cuando es sí, y no, cuando es no. Señor ayúdame a ser honesto conmigo mismo y con los demás; veraz en mis palabras en mi vida y en mi relación con los hermanos. Amén.