Beato Pier Giorgio Frassati

La breve vida de Pier Giorgio Frassati fue de una intensa fe cristiana, manifestada en una múltiple actividad apostólica. Pier Giorgio fue un miembro del laicado dominicano, al que San Juan Pablo II llamó "hombre de las Ocho Bienaventuranzas" y ha inspirado a muchas personas de todo el mundo, especialmente a los jóvenes.

Biografía de Pier Giorgio Frassati

Nació en 1901 en Turín en el seno de una rica familia que era poco creyente. Su padre era director y propietario del periódico La Stampa, de ideología liberal. De niño, a Pier Giorgio le costaba estudiar, por lo que, tras varios infructuosos cambios de colegio, su familia decidió contratar a un preceptor salesiano que, además de reconducirle académicamente, le ayudó a encontrarse con Dios, despertando en él una fe muy profunda.

Llegado a la universidad, Pier Giorgio se topó con un ambiente muy anticlerical, ante lo que él reaccionó promoviendo públicamente actividades religiosas. Así, se hizo miembro de la Asociación de Jóvenes Adoradores Universitarios, del Apostolado de la Oración, de la Liga Eucarística y de Acción Católica. También promovió entre los universitarios el rezo del Rosario.

 

Todo eso le trajo problemas con algunos compañeros. Pero tenía un gran sentido del humor. De hecho, en aquel ambiente ateo y anticlerical creó un grupo de oración y reflexión al que llamó: «Los sospechosos», y cuyo lema era: «Pocos, pero buenos, como los macarrones». Además, Pier Giorgio se convirtió en un apasionado montañero y esquiador. Le encantaba disfrutar de la naturaleza y respirar aire puro junto a sus amigos.

En su tiempo libre se esforzaba por ayudar a los necesitados, visitando a familias pobres, ancianos y enfermos. Fue así como se hizo amigo de un fraile dominico que daba catequesis a niños en un barrio obrero. Viendo que algunos le insultaban e intentaban intimidarle, Pier Giorgio se ofreció para acompañarle y defenderle. También era muy aficionado a los escritos de santa Catalina de Siena. Todo ello hizo que, con 21 años, tomase la decisión de ingresar en la Tercera Orden dominicana.

En esa época comenzó a ganar fuerza en Italia el fascismo. Y él decidió alertar a sus compañeros y a sus amigos contra esa ideología, convirtiéndose en un conocido antifascista. Obviamente, eso también le trajo muchos problemas. Envuelto en esa vida tan activa y tempestuosa, no dejó de visitar a personas pobres y enfermas. Y en 1925, en una de esas visitas, cuando Pier Giorgio tenía 24 años, le contagiaron la poliomielitis y días después falleció.

Este texto forma parte del libro Predicadores. Historia de la espiritualidad dominicana que expone cómo ha evolucionado desde sus orígenes hasta la actualidad. El autor, fray Julián de Cos Pérez de Camino OP (Madrid, 1968), es fraile dominico y Doctor en Teología.