- Santo Domingo resucita al joven Napoleón Orsini Pintura sobre tabla.
- Segunda mitad del siglo XVII.
- Medidas: 65 x 51 cm.
- Monasterio de San Blas, MM. Dominicas, Lerma (Burgos).
El anónimo pintor sitúa la escena en un recodo del camino, junto a un edificio, con fondo de rocas escarpadas que ascienden sobre la montaña próxima. La figura protagonista es Santo Domingo, que le concede mayor altura y proporción que a sus integrantes escénicos, a pesar de estar en segundo plano: un compañero dominico de rodillas, dos figuras de pie, un cardenal arrodillado y el joven muerto. La composición lineal se desarrolla siguiendo un recorrido circular en torno al Santo. En primer plano yace el joven Napoleón fallecido, después de la caída de su caballo, que no se alude a él para nada. A sus pies su tío, el cardenal Esteban de Fosanova. El milagro, acontece según la leyenda literaria, en Roma, en el monasterio femenino de San Sixto el Viejo, el día de la reunificación de los diversos monasterios femeninos de la ciudad, misión que el Papa le había encomendado al Santo. El cardenal acude a la ceremonia litúrgica, como representante del pontífice, momento en que sucede el fatal desenlace del sobrino y pide la intercesión y acción milagrosa de Santo Domingo.