Porque no trata de otra cosa esto de la Navidad que de aprender a amar

El lugar de Dios es lo humano, porque así lo sigue eligiendo. Un año más, la Navidad nos despierta a esta verdad, la de un Dios enamorado de nuestra pequeñez que desea hacer camino junto a nosotros. Por amor. Por puro amor. Porque no trata de otra cosa esto de la Navidad que de aprender a amar, tanto como somos amados. Dominicos te desea: ¡Feliz Navidad! Texto extraído de la meditación de Navidad “La Palabra se hizo hombre y acampó entre nosotros…” (Jn 1, 14), de fray Javier Garzón, O.P. https://www.dominicos.org/espiritualidad/meditacion/la-palabra-se-hizo-hombre-y-acampo-entre-nosotros/